- Levántate cada día a la misma hora y haz ejercicio. Es importante mantenerse activo. Lo mejor es seguir tutoriales de Youtube. También de baile si te gusta.
- Decide qué vas a hacer, estructúrate y focalizate. Lo peor es perder el tiempo yendo de una cosa a otra. Elige qué película o serie vas a ver, qué vas a leer y qué vas a hacer. Y hazlo. No divagues.
- Haz un curso online, gratuito o de pago. Lo mejor es centrarse en algo que te guste y le dediques tiempo. Hay cursos de todo tipo, también profesores particulares online.
- Pacta con tus amigos reuniones online por videollamada, pero con duración limitada.
- Inicia una afición Empieza a escribir, a pintar, a bailar, a interesarte por la astronomía, por el Antiguo Egipto, por la historia,…
- Planifica lo que quieres que sea tu vida cuando salgamos del confinamiento. Escribe lo que deseas hacer y qué quieres dejar atrás. Y qué personas quieres recuperar para tu vida.
- Imagina un lugar del mundo donde te gustaría viajar y haz un cuaderno de notas con todos los sitios y lugares que querrías conocer. Conviértete en un experto del lugar antes de ir.
- Escribe cartas a mano a personas que quieres.
- Practica meditación. Busca en Youtube tutoriales y hazlo cada día. Te ayudará a serenar la mente.
- Aprende a estar en silencio. Hasta que el conocimiento científico no se desarrolló la contemplación y la observación sirvieron a muchos hombres y mujeres para entender aquello que hasta ese momento era incomprensible.
El confinamiento, hasta que dure, que no será mucho tiempo más, también puede servir para el desarrollo de la conciencia y de las cualidades superiores del ser humano pero para ello es fundamental saber organizarse y no distraerse yendo de una cosa a otra sin descanso.
Uno puede tomar las riendas de su vida o abandonarse sin criterio a cualquier estímulo que aparezca. La primera opción es la que nos hace evolucionar como personas.
Damián Ruiz
Director del IPITIA