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La sobreadaptación en el TOC

Muchas personas con Trastorno obsesivo compulsivo (TOC) suelen tener actitudes y comportamientos propios de la sobreadaptación. Por ello, en este artículo vamos a explicar en qué consiste, cómo puede desarrollarse y cuáles son sus consecuencias.

 

¿Qué es la sobreadaptación?

Tal y como hemos citado anteriormente, muchas personas con TOC viven sobreadaptados al entorno y a las personas con las que están. Con ello nos referimos a que tienden a vivir complaciendo a los demás sin mirar por sus propias necesidades y deseos. Su actitud y conducta se rige por hacer lo que se espera de él/ ella y reprimen y disocian aquellas emociones y sentimientos que podrían hacer que los demás le rechacen o abandonen. Por ejemplo, no se permiten expresar rabia, disconformidad, rechazo… porque creen que si lo hacen, serán rechazados, abandonados o simplemente les dejarán de querer. Esto hace que la persona siempre se muestre complaciente y correcto con los demás, tratando de hacer sentir bien a todo aquel con el que está y teniendo una actitud sumisa y dependiente, pero interiormente siente irritabilidad, malestar, estrés, frustración, rabia… y cuando esto es así, hablamos de sobreadaptación. Por tal de comprender mejor en qué consiste, vamos a explicar cómo puede desarrollarse y qué hay detrás de la sobreadaptación.

 

¿Cómo se desarrolla la sobreadaptación?

Normalmente la sobreadaptación se inicia durante la infancia y /o adolescencia. La primera relación del niño/ a la establece con los padres y según el tipo de relación que los padres tengan con él/ ella facilitará el desarrollo de la desadaptación.

 

La sobreprotección de los padres

Cuando los padres educan a sus hijos desde la sobreprotección, es decir, cubriendo sus necesidades, haciéndoles todo por ellos sin dejar que sean ellos quienes se valgan por sí mismos, están favoreciendo que el niño/ a desarrolle una personalidad dependiente y que no sean capaces de tomar decisiones por sí mismos, necesitando la aprobación y consentimiento de los padres para hacer cualquier cosa. Ello no permite que el niño/ a crezca desde el error y el aprendizaje, lo que va generando una personalidad sobreadaptada, ya que la relación que establece con los padres será el tipo de relación que establezca con los demás, tomando actitudes dirigidas a la aceptación y aprobación de los demás.

 

Padres muy exigentes

Cuando los padres son muy exigentes pueden hacer que el niño/ a sienta a un nivel inconsciente, que para merecer su amor ha de conseguir ciertos objetivos o lograr ciertas cosas, en vez de sentirse queridos simplemente por lo que son. Por eso, fácilmente puede desarrollar comportamientos propios de la sobreadaptación, como por ejemplo, vivir tratando de satisfacer a sus padres y a los demás para sentirse aceptado y amado.

 

¿Qué hay detrás de la sobreadaptación?

 

Miedo al rechazo

Las personas sobreadaptadas son muy sensibles al rechazo y al abandono. Tienen mucho miedo a ser rechazados por los demás y por tal de evitar ser rechazados, inhiben su espontaneidad y la expresión de sentimientos que tienen que ver con la ira y la disconformidad.

 

Necesidad de agradar a los demás

Son especialmente sensibles a la opinión de los demás y su autoestima y bienestar depende del amor y aceptación del resto, por lo que su comportamiento y actitud se basa en la complacencia y en el esfuerzo constante de hacer sentir bien a la otra persona, buscando su aceptación y valoración por encima de sus propias necesidades y deseos.

 

Código ético rígido y altamente exigente

Las personas sobreadaptadas suelen ser muy exigentes consigo mismas, lo que les lleva a ser extremadamente perfeccionistas. Su ideal de perfección se presenta inalcanzable y ello hace que por mucho que consigan ciertos objetivos y logros de real importancia, para ellos nunca es suficiente e incluso tienden a fustigarse y a ser muy duros consigo mismos.

 

Vivir disociado de la propia autenticidad

Tal y como hemos explicado, la sobreadaptación se caracteriza, fundamentalmente, por buscar complacer a los demás y ello hace que uno se olvide de sí mismo y viva disociado de su propia esencia y autenticidad.

 

Consecuencias de la sobreadaptació

Es importante tener en cuenta que la sobreadaptación genera ciertas consecuencias significativas en el bienestar personal de la persona. Por ejemplo, su alta autoexigencia deteriora considerablemente su autoestima y vivir tratando de adaptarse constantemente al criterio y a las necesidades de los demás hace que uno viva con una sensación de agotamiento mental, estrés e irritabilidad. Por otro lado, el hecho de vivir centrado en complacer a los demás, hace que uno viva disociado de su personalidad más genuina, lo que impide que desarrolle sus propias capacidades.

La persona sobreadaptada siente mucho miedo a no ser aceptado y amado por los demás. De hecho, en su fantasía consciente o inconsciente, cree que si se expresa tal cual es, será rechazado o le dejarán de querer. Ello determina su comportamiento y hace que viva extremadamente condicionado por su entorno y que no pueda vivir desde el descanso y la paz de ser él mismo. Pero vivir sin ser capaz de ser uno mismo en su totalidad (expresando lo que a uno le molesta, irrita, necesita y desea) genera mucho malestar y frustración.

Estas serían algunas de las características que definen la sobreadaptación y que están presentes en muchas personas que padecen TOC, porque ambos términos están íntimamente relacionados. El origen y desarrollo de la sobreadaptación y el TOC tienen elementos en común: la inhibición de la espontaneidad, los instintos, expresar la disconformidad, etc.

Vivir sin tener la dependencia de agradar a los demás es liberador, sano y necesario. Sin embargo, cuando uno vive desde la sobreadaptación, es muy difícil cambiar esas dinámicas internas y externas por uno mismo. Por eso, a través de un trabajo psicoterapéutico centrado en el TOC, también se trabaja la sobreadaptación y la persona puede empezar a descubrir sus propias necesidades, valores y deseos propios; expresar y manifestar los núcleos de su personalidad más inhibidos, aumentar considerablemente su bienestar interno, desarrollar sus potencialidades, etc.

Jerónimo Carles.
Equipo de Ipitia
Barcelona

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